Blog de Juan Fernández

De todo un poco, como en botica. Apuntes medioseculares, donde, por hablar, se habla hasta del gobierno. Este blog cuenta con la bendición de los siguientes santos: San Woody, San Humphrey, San Frank McCourt, Santa Almudena, Grande de España, patrona de los canadienses, y Santa Dorothy Parker. Borrachos y borrachas de sombra negra, abstenerse.

Mi foto
Nombre:
Lugar: Madrid, Spain

jueves, enero 31, 2008

Vida y destino


Vitorio Grossman es mucho más que un novelista: es un registrador de la impropiedad humana. Con sobrecogedora lucidez, y con una maestría que a fuer de sutil puede pasar inadvertida, reinventa un universo habitado por seres prisioneros de sí mismos y de las circunstancias y muestra una surtida variedad de arquetipos: la mujer adicta al fracaso, la joven que deja pasar los trenes que paran en su puerta, el empeñado en dar siempre una vuelta más de tuerca, el héroe disfrazado de cínico, los comisarios políticos y morales. Por sus páginas, como por las ventanas de un tren que corre desbocado hacia el abismo, desfilan todas las grandezas y miserias humanas: la generosidad, la indulgencia, la neurosis, la cobardía, la pusilanimidad, la contradicción, la valentía, la belleza, la indigencia, el arribismo, el dogmatismo, el desinterés, la sensibilidad. A veces uno se pierde gustoso en la maraña de nombres y apodos, en el cruce infinito de relaciones, pero siempre hay un cabo suelto que te rescata. Libro de portentosa técnica, de extrema dureza, un descenso a los infiernos de la mano de un guía dispuesto a no ahorrarnos ningún paraje por escabroso y desolador que sea, imprescindible en estos tiempos de anorexia mental y ética, escrito por un gigante que se eleva sobre sus propias carencias y nos lega un tesoro con el que recobrar nuestras almas vendidas al diablo. La grandeza reside en no bajar jamás los brazos, aunque sepamos que el crupier hace trampas y el resultado esté adulterado. Y en que, aunque seamos proclives a la melancolía, nunca perdamos ese último resto de decencia que nos permite mirar más allá de nuestro céntrico ombligo.

miércoles, enero 30, 2008

Ceballos, filósofo

Al verme algo magullado los alumnos de 1º E, me veo obligado a explicar el motivo. Anoche, mientras hacía footing, tropecé y me caí. Les doy detalles: el MP3 por los suelos, la rodilla sangrando, la sensación ridícula que acompaña a toda caída... Seballos pide la palabra: pero, profe, ¿tú no sabes lo que es rebobinar? Lo que tenías que haber hecho, justo antes de tropesar, es haber rebobinado y dado marcha atrás, y entonses ya no te hubieras caído, que parese que sabes musho, pero luego de ná, hombre. Es un sabio caribeño. Definitivamente.

martes, enero 29, 2008

Lucía Barrero

Lleva unos cuantos días enfadada conmigo, no me sacas en tu blog, ni a Brian, ni a Miriam, prometes mucho pero luego no lo cumples, eso me dice, y lleva algo de razón, pero en fin, yo sólo quería darte las gracias, Lucía, por lo que has escrito sobre mí, aunque te hayas tragado alguna h, y decirle al personal que, si les apetece, pueden entrar a leer tu blog: www.luciabc.blogspot.com
Y mandarte un abrazo, claro.

lunes, enero 28, 2008

Bennett: las escuelas privadas deberían ser abolidas


Reconforta ver que hay todavía tipos lúcidos y decentes, como Alan Bennett, que dicen algo tan obvio como que el ventajismo educativo debe ser abolido. Muy recomendable la información del Independent, una vez más. Y repugna ver cómo los dos grandes partidos españoles entran en una subasta electoral que minusvalora el cociente intelectual y moral del españolito que vienes al mundo te guarde dios: cualquiera de los dos partidos ha de helarte el corazón.

domingo, enero 27, 2008

Los negativos perdidos de Robert Capa sobre la guerra civil

http://www.nytimes.com/slideshow/2008/01/27/arts/20080127_KENN_SLIDESHOW_index.html

viernes, enero 25, 2008

Roger Federer


Me ha impresionado la declaración de Federer, tras su eliminación del open de Australia: "He creado un monstruo que quiere ganar siempre". Ya le admiraba como persona y como deportista, pero estas palabras confirman que tras la elegancia exuberante de su juego se esconde un tipo excepcionalmente lúcido, alguien consciente de que el éxito desmesurado crea monstruos. Y el fracaso, también.

jueves, enero 24, 2008

Medidas sentimentales

En materia sentimental, es preferible tener un nada de nada que un poco de nada.

miércoles, enero 23, 2008

Telemann, Baroja y la felicidad


Pues claro que la felicidad es momentánea. Sin ir más lejos, registro que esta mañana he sido feliz mientras me dirigía en coche hacia el instituto: M-40, la luna llena en el horizonte, un concierto de Telemann en la radio, una galería presentida de rostros amables a quienes les hablaría de Baroja. Entro en la clase del Bachillerato y escribo: Excmo. Sr. D. Pío Baroja y Nessi. Luego, me siento encima de una mesa libre y digo: cerramos el cuaderno; hoy no hay que tomar apuntes.

martes, enero 22, 2008

Índices bursátiles

Se levantó por la mañana con el índice Dow Jones a la altura del talón, y puso la radio con la esperanza de que el índice Nikkei al menos le permitiese capear el temporal y alcanzar el primer café con una cierta holgura. Fue sin embargo el índice Nasdaq, con sus guarismos apocalípticos, lo que le hizo enfrentarse a la realidad: de una tacada había perdido a su amante y a un par de amigos (uno de ellos se había liado con la primera). Sin mucha esperanza aguardó a que el Ibex 35, en un gesto de solidaridad patriótica, le levantase un poco el ánimo. Inútilmente. Como bien titularon los periódicos, fue una verdadera hecatombe bursátil (y escrotal).

lunes, enero 21, 2008

La hipótesis de Prout

Prout, un químico inglés del XIX, intentó establecer el hidrógeno como unidad básica del peso atómico de los elementos químicos. No incurriré en farragosas explicaciones al respecto; baste decir que cometió un error de cálculo que se demostró al comprobarse que el peso atómico de algunos elementos distaba mucho de aproximarse a un número entero. Su hipótesis, la de Prout, fue consecuentemente refutada y dada por no errónea durante décadas. Fue necesario que, ya a mediados del XX, se comprobase que, aunque formalmente se equivó, en la práctica, por motivos insospechados para él, se acercó bastante a la verdad. A veces nos ocurre: acertamos al escoger la solución errónea. Y metemos la pata hasta al fondo cuando escogemos lo evidente.

domingo, enero 20, 2008

Los crímenes de Oxford


El título correcto debería ser El crimen de Oxford, porque es esta mágica ciudad, donde pasé un verano inolvidable, la que es masacrada. Película soporífera, con una logorrea insoportable, como si la incesante cháchara de los personajes quisiera maquillar lo endeble de la trama, lo enrevesado del guion. Los actores, John Hurt, Elijah Wood y Leonor Watling, no consiguen hacer verosímiles sus personajes. Se supone que el primero encarna un profesor crepuscular y cínico que está más allá del bien y del mal; el segundo, un joven mitómano que venera al primero y la chica, además de lucir un cuerpo de escándalo, debe ser el nexo morboso entre ambos machos. El resultado, frases con vocación de eternidad al margen, es un spaghetti negro, que ni siquiera el más o menos ingenioso final logra redimir. Claro que, como Alex de la Iglesia es español, parece un tipo ingenioso y dicharachero, goza de la simpatía indulgente incluso de lobos feroces como el afamado Boyero, se le perdona la vida y aquí paz y después crímenes. Para colmo de males, los palomiteros y cocacoleros ya ni siquiera respetan recintos otrora sagrados como los Renoir de Martín de los Heros. Un desastre, en resumen. Vayan a ver, en su lugar, En el valle de Elah, que tiene buena pinta, o This is England, que también.

sábado, enero 19, 2008

Del sintagma nominal y otras martingalas

Ahí estamos, explicando a chicos de 12 años la estructura del sintagma nominal. A ellos les cuesta entenderlo; a mí, hacerme entender. Tengo la convicción de que la educación en España es un cadáver que se mueve por inercia, camino del abismo. Hay un divorcio absoluto con la vida, se margina de manera desoladora el presente: el cine, los mass media, el sexo, la tecnología, la ciencia, el ocio, el consumo. Aquí seguimos con los guisantes de Mendel y los lexemas, inasequibles al desaliento, erre que erre, hablando de diseños curriculares, integraciones, diversificaciones y toda esa jerga de beatos y meapilas. Entramos en la clase y damos un portazo, dejando fuera la vida. No me extraña que el ya mítico Seballos me pregunte: Profe, ¿quién inventó la educasión; es pa´cagarme en él.

viernes, enero 18, 2008

De la gloria y otras miserias

Iba a ser, en fin, mi momento de gloria, el fin del anonimato, los cinco minutos de gloria a los que todos tenemos derecho según Warhol, lo que haría que después de diez años como cliente, el carnicero y el frutero dejasen de llamarme caballero y supieran que me llamo Juan, que las hermosas bibliotecarias del barrio le pusieran rostro al autor del artículo que colgaron, ampliado y plastificado, en el vestíbulo de la biblioteca municipal (nunca me atreví a decirles que era yo), el definitivo ingreso en la pléyade de notables del barrio. Sirva como atenuante que era ya casi medianoche, que el local estaba lleno de humo, que habíamos tomado, el periodista autor de la entrevista y yo, sendos riojas por barba, que no soy demasiado fotogénico, pero... ¡coño!, ¡es que parezco Fernando Trueba en pleno coma etílico! Totalmente abatido, les muestro la foto a familiares y compañeros y todos coinciden en el luctuoso diagnóstico: eres tú, clavado. Sirva esta pública confesión como penitencia por todos mis pecados, pasados y venideros.

jueves, enero 17, 2008

Las claves del deseo

En fin, resulta que hasta la atracción se puede convertir en materia mensurable.

Y en eso llegó Gabriel

Ahí estamos, una decena de amigos, en la tertulia literaria mensual, degustando un té de jazmín (los más osados) o un café con leche (los tradicionalistas como yo), haciendo toda suerte de conjeturas, de sutiles disquisiciones, compitiendo sordamente en ingenio y osadía, acerca de la novela Elegancia del erizo, cuando Gabriel, con su sonrisa charra, curtida en mil batallas, sentencia:
-El protagonista es el gato.

miércoles, enero 16, 2008

Nati

Mi compañeray sin embargo amiga Nati pertenece a esa última hornada de profesores que, con su juventud exultante, te recuerdan que en esta carrera ya estás aproximándote a la última vuelta del camino. Confieso que Nati, con su pulcra sensatez, con ese azul sosegado con que te escucha, hace que nuestra hora compartida de guardia bibliotecaria de los martes sea una de las que más disfruto. De ser poesía, sería un soneto, con su arquitectura equilibrada y ecuánime y con esa armonía íntima que se desprende de la precisa y sabia disposición de los acentos. Por si fuese poco, es eficiente. Su revista Renglones me parece un prodigio de buen hacer. Gentes como Nati (y como Manuel, Jesús, Mª José y tantos otros) no sólo dignifican la profesión: son un aliciente para poner el coche en marcha cada mañana y enfilar la M-45 rumbo al Caro Baroja. Gracias por el azul de tu sonrisa tranquila.

martes, enero 15, 2008

Ángel González, poeta


Confieso, que Manuel y Carmen O. me perdonen, que no soy un gran lector de poesía (ni de ensayo, aunque por diferentes razones). Tal vez a ello contribuya que, salvo alguna honrosa excepción (Francisco Brines, por ejemplo), cuando he tratado personalmente con poetas, me he encontrado algún especimen dado al cultivo infatigable de su parcela de gloria, tipos fatuos y arrogantes tendentes al vedetismo y al ombliguismo, incapaces de ver más allá de sus cuitas personales. Soy consciente de la injusticia y simpleza de estos comentarios porque, a fin de cuentas, tampoco he tratado con muchos poetas, pero no soy ajeno al caudal de prejuicios y clichés que todos llevamos dentro. Sirva tan interminable preámbulo para decir que la razón por la que Ángel González me entusiama es porque no parece un poeta al uso. Proclive como era a la melancolía, muy dado a apostar siempre por el caballo perdedor, con la dosis de lucidez y coraje precisos para percatarse de la miseria mundana, pero también con el arrojo de seguir en pie de guerra, ignorando el resultado ya escrito de antemano y compulsado por los burócratas de guardia. Su verso me gusta porque, aunque aparentemente habla de él, es capaz de trascenderse y hablar de nosotros mismos. Me miro en el espejo de su obra y reconozco la figura desconcertada, amarga y ética que sobre él arroja la luz incierta de su poesía.

lunes, enero 14, 2008

El orfanato

Crítica del New Yorker sobre esta película española. Confieso que no entiendo a los americanos. Primero, Almodóvar; ahora, esto. En fin. Lean y juzguen. Estamos hablando de la revista con más prestigio intelectual del mundo, ojo.

Felipe

Aprovechando que hoy, al parecer, JC no ha ganado ningún premio (hace ya la friolera de tres días desde el último, debe de andar en horas bajas), hablaremos de Felipe, el encargado de la cafetería en el instituto. Él no lo sabe, pero es un iconoclasta. No de otro modo cabe llamar a quien se niega por sistema a cobrarme los cafés, y me obliga a enzarzarme en batallas extenuantes para conseguirlo. Déjalo, Juan, te invito al café. Y yo busco cobijo en Maruja, su mujer, para ver si entre ambos conseguimos que me acepte el euro pertinente. Acostumbrado a los reiterados desfalcos de los bancos, los seguros, los talleres de coches y la Semana Fantástica de El Corte Inglés, en un mundo en el que abundan las almas de contable, lo de Felipe no deja de ser una auténtica bizarría. Quédate con el cambio, le digo, rumboso, mientras salgo por pies, no vaya a ser que me devuelva el importe.

domingo, enero 13, 2008

Ángel González

En ti me quedo

Expiación


Comenzaré por el final: los últimos siete minutos, con una colosal Vanessa Redgrave en la pantalla, justifican con creces el precio de la entrada por esta película, Expiación. No es que James McAvoy y Keira Knightley no sean dignos de alabanza, ni la estupenda fotografía, con su sagaz adecuación de tonos para cada una de las tres partes de la historia, ni la acompasada banda musical, o que el propio Joe Wright, guionista y director, no haya hilado fino para condensar las 130.000 palabras de la novela de McEwan en las 20.000 del guión, pero es que lo que hace la Redgrave en la deslumbrante vuelta de tuerca final, es de auténtico chapó. Por lo demás, en mi opinión la película tiene un arranque portentoso, declina en su tramo bélico y vuelve a remontar el vuelo, y de qué manera, en el último canto del cisne. La historia trata del sentimiento de culpa, del peaje por los prejuicios, de la pasmosa facilidad con que se abortan las hermosas historias de amor. Del precio que pagamos, en definitiva, por haber girado a la derecha cuando nuestro corazón nos marcaba claramente el camino opuesto; el más escarpado, sí, pero el único que merecía realmente la pena.

viernes, enero 11, 2008

Mashote

La mañana no había sido fácil y entro en clase, a última hora, desacostumbradamente tenso. En vano espero a que se callen, y es en plena algarabía cuando un chico nos obsequia con un grito tarzanesco. Estallo y suelto un par de exabruptos que desconciertan a la clase, por lo inhabitual. Hoy, el ya mítico Seballos, me dice, con su proverbial asento caribeño: profe, ayer me gustó tu reassión, me demostraste que eres un mashote; es que antes, profe, mira lo que te digo, eras un poco blandito, como mariposilla; entonses me dije: ese es mi profe.

jueves, enero 10, 2008

Ollos verdes

Siempre que te veo de espaldas, me confundes, le escucho decir a Guadalupe. Tu espalda es propia de alguien con los ojos azules, prosigue. Me somete a un severo escrutinio pupilar y concluye: ves, tú los tienes verdes. Innecesario aclarar que Guadalupe es profesora de Plásticos y Decibelios.

miércoles, enero 09, 2008

Llegado el caso, Bogart

Llegado el caso, Bogart reprimirá con un último suspiro la creciente náusea, se ajustará el sombrero, se subirá bruscamente las solapas de la gabardina, tirará la colilla hacia atrás, como remando al viento, y saldrá vestido ya con la mueca de faena. Mientras llega al callejón donde se ha citado con la negritud, sentirá la certeza de que esa es una batalla ineludible, aun a sabiendas de que se saldará con una derrota colectiva y de que una vez acabada la estupidez y la miseria seguirán desplazándose ajenas al resultado de la ecuación de tercer grado. Luego, se apartará púdicamente a un rincón aún más oscuro, pero solitario, y vomitará un gato de angora.

Las bizarrías de Belisa


Un Lope crepuscular, con un pie en el estribo, nos regala una comedia rabiosamente juvenil, con el amor como fuerza centrípeta que hace jugar a su merced a los protagonistas, enredados en la consabida retícula de amores y olvidos, de aproximaciones y rechazos. Con independencia de la trama, la adaptación llevada a cabo por Eduardo Vasco refuerza ese aire liviano de la obra al introducir unos ritmos y maneras contemporáneos que los espectadores, especialmente los jóvenes, agradecen sobremanera. Prodigiosa la resolución técnica, con hallazgos especialmente logrados como los trayectos en coche de caballos y la introducción de las escenas. La interpretación, más que aceptable. Un trabajo digno de verse, sin duda.

lunes, enero 07, 2008

Una propina accidentada

El dueño del restaurante árabe, en una aldea perdida de Málaga, ha tenido la gentileza de descontar 9 euros de la cuenta al incluir en el menú dos platos que no estaban en la lista. Por eso, y por la exquisitez de la comida, me parece de justicia dejar una generosa propina. Ya he arrancado el coche y he iniciado el camino de regreso cuando le descubro por el retrovisor corriendo como un poseso hacia mí. Se ha olvidado vuelta, me dice en un castellano precario. No, no, es Okey, respondo, con mi proverbial habilidad, digna de Trillo, para confundirme de interlocutor. Se queda estupefacto, no sé si por la propina o por mi spanglish. Finalmente sonríe y deja al descubierto un teclado perfecto.