La mujer que vino del calor

Desmintiendo a mi admirada Ana, que sostiene que Lu, la mujer que viene de la luz y del calor, no existe, mañana domingo está prevista su llegada a Madrid en carne y hueso, procedente de Brasil. La vida tiene estas paradojas: la amistad prende en otro continente y precisa cruzar todo un océano para poder darte un abrazo. Nuestra amistad será eterna en cuatro horas. Bienvenida, Luzia Kirjner.